Serenum ha vuelto a la ciudad. Podríamos decir de él que es la definición más fiel de la palabra libertad. Viene y va, no necesita mucho para afrontar la vida. Capaz de ser un politico, un mago de algun juego de internet, un hippie de viajes intensos y noches en bancos, un amigo y en definitiva un maestro del disfraz y un maestro en la contención de emociones.
Desde que abandonó la ciudad en busca de nuevas experiencias, Oldman y yo quedamos un poco cojos, por no decir exageradamente cojos. Ya no teníamos el picante de las bromas sobre orientaciones sexuales, las fiestas no eran lo mismo, se agotaban los cubatas de la misma manera pero eran dos los basos de tubo que se vaciaban en cada ronda y no tres.
Mentiría si dijera que no recorde mil veces una anecdota, un momento de la vida que duró lo que dura la canción de Kids, dondé se aparcó por un momento la racionalidad, el pesar del mundo y la euforia tomó las riendas de algo que para mi hoy es la simbologia y la verdad sobre como disfrutar la vida.
Serenum ha vuelto a la ciudad y ya podemos volver a ser los tres pies del gato.
3 comentarios:
que bonito^^
tengo ganas de salir de fiesta con ese gato
por cierto, en youtube ya estan las performances del nuevo de fischerspooner y me están encantando
me alegro ^^
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